las creencias
Siempre me equivoco ¿qué significa eso de ti misma? Tengo que ser fuerte ¿qué tipo de persona tiene que demostrar su fortaleza? Las creencias tienen un poder enormemente transformador en nuestras vidas. En nuestro desarrollo hacia la adultez hemos ido desarrollando creencias que nos mueven en esta existencia, siendo fundamentos de dolor y a veces de apoyo. Muchas de las creencias son limitantes, congelan y frenan el fluir de nuestra energía vital y mental, evitando que podamos relacionarnos con los demás y con nosotros mismos de una forma más saludable, integra y auténtica Las creencias están escondidas en las heridas emocionales o traumas que hemos experimentado de infancia, las cuales están somatizadas en nuestra mente en forma de ideas, juicios y valoraciones que congelan la fluidez de ser yo misma. El adecuado acompañamiento psicosomático terapéutico apoyará el abrir los ojos internos a la realidad del inmenso potencial sanador que hay detrás de la creencia limitante descongelándola del estancamiento hacia la libertad. Quiero cerrar con estas palabras del Dr. Gabor Maté que son muy inspiradoras y reveladoras hacia una creencia y a la vez una realidad que acompaña a muchas personas "Tan pronto como entiendas que tu esencia es amor, y que no sólo eres digno de que te amen, sino que realmente eres amor - y lo digo incluso para aquellos de ustedes que creen que no fueron deseados cuando eran niños, que sus padres se embarazaron por accidente, o que no los deseaban, o que los quisieron abortar, que es algo con lo que he trabajado bastante, gente que me dice que fueron tan poco deseados que sus padres incluso quisieron abortarlos y que hasta lo intentaron... ¿Cuál es la verdadera respuesta en cuanto a si eran deseados o no? La verdadera respuesta es que deben haber sido muy deseados. Algo en este mundo los quería tanto que incluso el intento de matarlos no funcionó. Y eso es porque la vida se quiere a sí misma. El amor que existe en este universo sólo quiere la vida. Y eso es más grande que si tu madre o tu padre te deseaban o no. Ahora, esto es fácil de decir. No puedes convencer a nadie de ello. Pero puedes reformular la idea, que lo que tu padre o madre pensaban subjetivamente ciertamente te hirió y te afectó, pero no es la realidad última. Solamente eran humanos atravesando sus propios procesos" |